“Estas limitado de tiempo, así que no lo malgastes en vivir la vida de otros. Mantente hambriento, mantente tonto”
Steve Jobs
Como artista siempre he tratado de que todas mis creaciones sean originales, autenticas, con identidad y basadas en un mensaje, historia o inspiración. Esta cita de Steve Jobs, calo profundo en mi pensamiento cuando la oí por primera vez, una manera simple de decir: Preocúpate por lo tuyo y por lo que hagan, digan o piensen los demás, no desperdicies tu tiempo porque el mismo es oro y una vez pasa no lo puedes recuperar. Así que brilla por luz propia, aprende, conoce, vive y ama para poder entonces crear. Mantente hambriento para que tengas la necesidad y el ímpetu. Mantente tonto para que siempre busques el porque, aprendas algo nuevo cada día y valores el conocimiento obtenido por experiencias vividas.
La identidad de nuestra gastronomía es vital para su conservación y exportación. El desarrollo de nuevos restaurantes de comida puertorriqueña tanto tradicional como nueva, han tenido buena acogida al enfocarse en ofrecer productos de mejor calidad, buena presentación de platos y sabores mas autóctonos y consistentes. Otros prefieren copiar el menú de restaurantes en su zona y caen en la zona del cliché, donde no aportan nada a la gastronomía de la zona y son solo uno mas en la espera del éxito. En estos tiempos el copiar un negocio es seguido por el fracaso. La evolución de nuestra sociedad es muy exigente y lo dejara en el olvido. Puedo mencionar un caso de una zona que yo mismo soy testigo de su decadencia.
En Puerto Rico, el área de Joyudas fue conocida como la meca de los restaurantes de pescados y mariscos por décadas hasta finales de los 90. Un sector costero de Cabo Rojo que contaba con más de 30 restaurantes a lo largo de la carretera 102, se ha detenido en el tiempo por la falta de evolución de sus restaurantes.
Aquí 5 distintos restaurantes me decían que eran los creadores del mofongo relleno o del pescado relleno de mariscos, todos copiaban los platos del restaurante continuo llegando a tener básicamente el mismo menú en todos los restaurantes. La mayoría de estos negocios eran de familias que mantenían los mismos cocineros por generaciones. Le daban trabajo a familiares en la cocina que a su vez trabaja, se iban a los otros restaurantes de Joyudas cargando las mismas recetas que les habían enseñado sus parientes.
La falta de originalidad y creatividad, que van de la mano con el conocimiento y las experiencias globales, no provocaron la motivación de evolución de estos negocios. Se quedaron en el tiempo y siguen con el mismo menú, lo que provoca que el área carezca de alternativas para los comensales que buscan nuevas experiencias gastronómicas, sabores y calidad. Solo sobreviven los que mantuvieron la consistencia en su cocina con sus mariscos frescos y los que desarrollaron una lealtad familiar, que por generaciones los invade la nostalgia cada vez que visitan el restaurante.
Con esta historia reseño lo que provoca el copiar los menús de negocios en una misma zona. Puede tener varios de los platos ya tradicionales, pero debe tener aunque sea uno fabuloso, por el cual lo reconozcan y valga la pena ir exclusivamente a degustarlo.
El conocimiento y las experiencias son las que pueden llevar a un chef o restauranteur a tener la visión de un nuevo concepto, un nuevo plato o la aventura de haber viajado y traer cocinas de otras culturas para que sus amigos y familiares sean participes y tengan un espacio para relajarse y disfrutar junto a el.
Joyudas podría volver a ser la meca que una vez fue si sus comerciantes se unieran e hicieran una reestructuración del área. buscando asesoría para mejorar y modernizar sus menús, cocinas, decoración y ambientación. Las estructuras que son estorbo publico las removieran y limpiaran el área para acceso a la playa o disfrutar de la vista al mar. El municipio podría construir rampas para embarcaciones y dar énfasis a los viajes a la isla de cayos ratones. De esta manera se promueve el turismo en el área además de los restaurantes. Otro atractivo seria que surgieran nuevos restaurantes con conceptos importados de otros países costeros. Asiáticos, suramericanos, mediterráneos, americanos, hay todo un mundo para escoger, lo importante es estudiar bien su cultura gastronómica y cocina para reflejar su identidad y autenticidad.
Los puertorriqueños somos buenos peleadores cuando estamos arrinconados, es hora de poner a Puerto Rico hacia adelante y dejar saber nuestra originalidad y creatividad al mundo.